Ante esa pregunta tal vez tenga
que responderme que sí, porque de lo contrario la sociedad se indignaría ante
determinados anuncios y no lo hace.
Para muestra dos ejemplos, un
conocido establecimiento de venta para el día del padre hace un anuncio, donde
dos hijos van con sus respectivos regalos encantados hasta el padre. Cuando
llegan a él, el padre desprecia a uno apartándole porque su regalo no tiene
valor o no es lo que quería, aún sin abrirlo y abraza el regalo de la otra,
porque contiene el móvil, la cámara o el aparato que deseaba y el hijo aprende
la lección y se le ve comprando en esa tienda el próximo regalo para que su
padre no lo aparte. Vale que fomenten la venta de su producto, pero un anuncio
en que todos los hijos uniesen sus ahorros para comprarle a su padre con la
colaboración de su madre (porque con esas edades no podrían trabajar
legalmente) el mismo producto, ¿no valdría para lo mismo?.
Y el segundo, es de una conocida
empresa de telecomunicaciones, donde dos deportistas de élite le indican a sus
fans que no digan la verdad, que mientan si es necesario para poder ver sus
carreras. Y claro estaremos igual de encantados cuando nuestros hijos nos
mientan, para todo aquello que les guste.
Antes un rostro famoso, era
contratado para que se siguiese su buen ejemplo, supongo que ahora también se
les contrata para que sigan su ejemplo. ¡Es solo un anuncio¡, si, lo es; pero
también lo eran antes. Con ello, no digo que esto es un mal ejemplo de un
deportista, no, es un ejemplo de la sociedad en la que vivimos. Ellos solo
hacen una publicidad por la que se les paga y dicen lo que aparece en el guión,
que es al parecer lo que nos encanta escuchar a nosotros, tanto que
contrataremos esa empresa.
También me podréis decir que la
publicidad juega con la controversia para conseguir mayor difusión, pero en
realidad, ¿no es eso también muestra de un valor de la sociedad?
Pero me permitiréis expresar mi
opinión, no me gustan los mensajes de este tipo de anuncios.
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